Quisiera decirte tantas cosas que no me atrevo a decirte, por miedo a encontarme una respuesta que no quisiera oír. Entraste en mi vida como una rayo entra en la habitación cada mañana, silencioso, astuto y sabiendo lo que haces. Pero, desde un momento, esas miradas por el pasillo, las risas el día que por primera vez hablamos, los juegos de agua, simplemente aquel jueves semana santa. Tu ya has marcado un antes y un después en mi vida, solo quiero saber que es lo que tu quieres, simplemente eso. Se que no estas pasando por un buen momento ahora, pero se también que todo pasa, y que si quieres compartir esa vida tuya tan misteriosa, pero menos para mi, yo estaré aquí para lo que necesites, para esos momentos de risas, bailes y también para esas preocupaciones tuyas ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario